LAS PALABRAS ESCONDIDAS

Oye hermano, no te extrañe que algún día te escondan las palabras, que te prohiban recordar... porque para liquidar a las naciones, lo primero que se hace es quitarles la memoria. Se destruyen sus libros, su cultura su historia. Y luego viene alguien y les escribe otros libros, les da otra cultura y les inventa otra historia.

Entonces la nación comienza lentamente a olvidar lo que es y lo que ha sido y el mundo circundante lo olvida aún mucho antes.

- ¿Y el idioma?
- ¿Para qué nos lo iban a quitar?

- Se convierte en un mero folklore que muere, al cabo de un tiempo, de muerte natural. Y así un invasor tras otro.

¿Será cierta la tesis de Kundera cuando dice que la lucha del hombre contra el poder es la lucha de la memoria contra el olvido?

Hay sabios que saben todo y que ya no pueden decir nada: Es muy peligroso cuando hablan, porque dicen puras verdades.

Total una vida sin reflexión y amor al trabajo no merece vivirse.

miércoles, 21 de mayo de 2014

DICHOS LATINOS, ANALISIS, 1855 AÑO. . CXXV

EL FILÓSOFO, DE LA  CALLE UNGA

EL REY

FORTUNA OBESSE NULLI, CONTENTA  SEMEL EST
Bien vengas, mal, si vienes solo.

Me dijeron que Rabindranaz Tagore expresó: “Señor, soy como la flauta de bambú, sopla Tú para que cante”.

Lenguaje Sublime, manejo de la mejor poesía que nunca se había escrito. Lenguaje del espíritu. Manifestación interior “troncos de soledad, barrancos de tristeza donde rompe a llorar”.

Duele enterarse que en el lenguaje ordinario hay un conjunto de palabras secretas sin contenido claro y a cuya mágica ambigüedad confiamos la expresión de los más brutales o sutiles de nuestras emociones o reacciones. Palabras “malditas” que pronunciamos cuando no somos dueños de nosotros mismos. Palabras que nada dicen y dicen todo. El adolescente las repite con voz ronca cuando quiere presumir de “muy hombre”. Las repiten las señoras cuando quieren significar su espíritu de “mucho mundo”, “onda femenina”, espíritu de libertad y de sinceridad.

Un ejemplo ilustrará este mundo mitológico de la expresión: “Yo sé bien que estoy afuera, pero el día que yo me muera se que tendrás que llorar. Llorar y llorar, llorar y llorar… Dirás que no me quisiste pero vas a estar muy triste y así te vas a quedar..  Me abandonaste mujer porque soy muy pobre, abandonado sea por el amor de Dios”.

Verdadero grito de los vencidos; peor si son jóvenes que prefieren pedir la fruta por no sembrar un árbol y esperar.
¡Viva México, Hijos de María Morales!. Grito de guerra que “con dinero y sin dinero hago siempre lo que quiero y mi palabra es la ley”, ¿Quiénes son esos hijos?” parecen ser los demás, los que no piensan como nosotros los que no nos quieren. En última instancia son aquellos que no son lo que nosotros somos. Hijos de una madre indeterminada, con dinero o sin dinero, porque entiende que la riqueza no es suficiente para vivir la vida con plenitud.

Algunos personajes viven de reinos soñados “no tengo trono ni reina ni nadie que me comprenda, pero sigo siendo el rey”, y que por resentimiento social no le queda más trono que la barra de cualquier cantina.

No faltan los fatalistas “una piedra del camino me enseñó que mi destino era rodar y rodar”. Rodar como “el señorito satisfecho” que todo se le da, atribuyendo a su persona condiciones que no ha creado. Nace instalado. Vive instalado muere instalado. Nada tiene que ver con sus riquezas, porque no son de él. Está condenado a representar al otro y de esa manera, a no ser ni el otro, ni él mismo. Solamente rodar y rodar, porque no se sabe lo que cuesta detenerse a la orilla del camino y no dejarse llevar por la corriente.

Dice el compositor “Después me dijo un arriero que no hay que llegar primero, pero hay que saber llegar”. ¿Da a entender que cómo dé lugar se debe llegar o quiere decir que no importa el llegar primero y solo, que llegar todos juntos y a tiempo?.

Al fin de cuentas, termina cantando el autor: “Yo compongo mis canciones para que el pueblo me las cante y el día en que el pueblo me falle ese día voy a llorar”.

El día en que el pueblo, así como canta sus coplas quiera defender sus derechos, ese día si, algunos tendrán que llorar.

¡Ojalá que te vaya bnito!
¡Ojalá que disipen sus penas!
¡Ojalá que lean lo que no pude escribir!

Total una vida sin reflexión, sin amor al trabajo y sin libertad, no vale la pena vivirse.  Francisco Flores Aguirre.
Nos vemos en la siguiente entrega.

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