LAS PALABRAS ESCONDIDAS

Oye hermano, no te extrañe que algún día te escondan las palabras, que te prohiban recordar... porque para liquidar a las naciones, lo primero que se hace es quitarles la memoria. Se destruyen sus libros, su cultura su historia. Y luego viene alguien y les escribe otros libros, les da otra cultura y les inventa otra historia.

Entonces la nación comienza lentamente a olvidar lo que es y lo que ha sido y el mundo circundante lo olvida aún mucho antes.

- ¿Y el idioma?
- ¿Para qué nos lo iban a quitar?

- Se convierte en un mero folklore que muere, al cabo de un tiempo, de muerte natural. Y así un invasor tras otro.

¿Será cierta la tesis de Kundera cuando dice que la lucha del hombre contra el poder es la lucha de la memoria contra el olvido?

Hay sabios que saben todo y que ya no pueden decir nada: Es muy peligroso cuando hablan, porque dicen puras verdades.

Total una vida sin reflexión y amor al trabajo no merece vivirse.

jueves, 22 de noviembre de 2012

DICHOS LATINOS, ANALISIS, 1855 AÑO. LVI

EL FILÓSOFO, DE LA  CALLE 
                                                                                       LA CIGARRA Y LA HORMIGA

La Cigarra y la hormiga siguen dando motivos para la reflexión. Ya nos había dicho Catón que la cigarra había muerto de hambre y de frío, pero que el  buen Dios la había tomado en sus manos delicadamente y se la llevó a la mansión celestial, porque una bella canción, vale más que mil graneros -dijo Dios.
Supimos después por el UNGA que la cigarra incomprendida por la in­mensa mayoría del universo, como lo son los artistas músicos, Dios le aca­ba de dar una plaza en los coros celes­tiales. Las últimas noticias nos dicen que ya es Director de la Orquesta de San Pedro, y solista de la Schola Cantorum que dirige el insigne Maes­tro Salomón. «Y quienes tienen buen oído afirman que de vez en cuando, confundida entre las voces de los án­geles, se oye el canto de una cigarra».
Pasó el tiempo y un día, Dios le habla a la cigarra y le dice: -hija mía, deseo darte un regalo por tu extraordi­nario comportamiento. Pídeme lo que quieras.
La cigarra, emocionada al oír ésto le contestó: -Quiero volver a la tierra, si es posible casarme y agradecer a la única hormiga que me ofreció un vaso de agua cuando estaba moribunda.
La cigarra regresó a la tierra, y con mucha suerte se casó con un grillo millonario. Inmediatamente se dirigió al hormiguero en búsqueda de su ami­ga que le había ofrecido la frescura de un vaso de agua en su agonía. Toca la puerta. La hormiga la ve y emocionada le dice:
-Hermana cigarra, que gusto me da verte creía que habías muerto!
-Bueno, por ahora o tiene caso el explicarte, ya comprenderás le dijo la cigarra.
-¡Vaya hermana, se ve que te ha ido muy bien! -observa la cigarra-.
-Mira que bien vestida vienes: Pie­les, joyas; ¡guau, y mira el carro que conduces!
¿Con quién te has casado?
-Con un grillo millonario que me adora -contesta orgullosa ¡a cigarra-. He venido hasta tu casa para agradecerte personalmente y de todo corazón, lo que hiciste por mí en aquella noche invernal.
-¡Ay hermana cigarra, me haces sentir mal, yo sólo he...!
-Nada, hermana hormiga, quiero ofrecerte algo, un regalo. -Insiste la ci­garra.
-Es suficiente con que hayas ve­nido a visitarme y a decirme estas hon­rosas palabras -afirma agradecida la hormiga.
-Bueno, me despido pues.   Hoy mismo salgo de vacaciones a Grecia junto con mi esposo el grillo.
-Vas a Grecia?, -Inquiere llena de curiosidad la hormiga..
-Sí, responde emocionada la hor­miga. Cuando llegues a Grecia, ve a buscar a un moralista llamado Esopo, le tiras una trompetilla y le dices que vaya mucho a.... China a contar sus his­torias.
Moralejas:
No todo lo que tiene 70 años huele a podredumbre.
Ni todo lo que tiene 2,000 años de existencia huele a Santo.
Mucho menos lo que acaba de nacer, puede olvidar quien lo parió.
Recuerda joven, que lo primero que hacen para liquidar a los nacio­nes, es quitarles la memoria, porque -como afirma Kundera -la lucha del hombre contra el poder es la lucha de la memoria contra el olvido

POSDATA NO. 8  2000
Total, una vida sin reflexión no merece vivirse.
Nos vemos en la siguiente entrega, será todos los días.
Si desea consultar la colección de dichos véalo en www.santoysena.com.mx/vidaprivadadepalabras

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